Tuesday, October 28, 2014

Los antepasados

“Cuando trabajaba en mi árbol genealógico, entendí la extraña comunión del destino que me une a mis antepasados. Tuve el fuerte presentimiento de que estaba bajo la influencia de actos y problemas que quedaron incompletos, no resueltos por mis padres, mis abuelos, y mis otros antepasados. Tuve la impresión de que a menudo en la familia hay un Karma impersonal transmitido de padres a hijos. Siempre pensé que tenía que responder preguntas ya hechas a mis antepasados o que tenía que concluir,o continuar los problemas no resueltos previamente”.

Carl Gustav Jung

Monday, October 27, 2014

La enfermedad

La enfermedad no es agradable, es una incomodidad de la que uno necesita salir. Y para salir tiene que cambiar, y para cambiar tiene que crecer, expandirse, y de alguna manera, reinventarse uno mismo. Las enfermedades nos ponen en ruta evolutiva. El impulso por “curarse” termina finalmente convirtiéndose en un peregrinaje de crecimiento espiritual

Manuel Gerardo Monasterio

Sunday, October 26, 2014

Condiciones programantes a partir del Nacimiento

La primera autonomia ocurre con el nacimiento.

La segunda, es la manera de salir al mundo  exterior desde el hogar.

Cada vez que la persona se confronta  con una autonomía , su cerebro va a releer la grabación o impronta que realizo en el momento de su nacimiento.

Las diferentes maneras de venir al mundo programan el estilo de proyectarse en la acción. 

Algunos  ejemplos a modo de ilustración:

* El niño accidente o no deseado:

Si el niño ha nacido es porque hay un deseo inconsciente de los padres, de la ley natural de la continuidad de la especie y  el deseo de encarnar del alma. Hay fecundación a pesar de que a nivel consciente las circunstancias no sean las adecuadas. Pero muchas veces el niño no es deseado conscientemente.
Esta emoción se imprimirá en el vientre y la persona tendrá la sensación de que por el solo hecho de” estar” ( de vivir) molesta. Tenderá a no  sentirse parte del entorno y a sentir el impulso de disculparse  o pedir perdón  constantemente por todo.

* Nacimiento con fórceps 

El bebe comienza el trabajo de parto y en el momento de salir se encuentra bloqueado. Aquí algunas veces se utiliza el fórceps para sacar al bebe.
Esto imprime en la persona la dificultad de llegar al final de las cosas sin estar acompañado, le cuesta terminar de concretarlas solo. Son personas que actúan y hacen cosas importantes en su vida, pero en un momento dado se bloquean, e  inconscientemente buscan siempre a la persona adecuada para ayudarlos en su necesidad.

Mariana Anchorena

El Dr.Hamer y su teoría

El concepto convencional acerca de la enfermedad es que es algo malo que debe suprimirse. Esta noción se aplica no sólo en la medicina oficial, sino en muchas variantes de las medicinas alternativas.
 Esta ideología está tan arraigada en la mentalidad colectiva que no puede sorprendernos que las ideas del Dr. Geerd Ryke Hamer hayan resultado escandalosamente peligrosas para el Status Quo ideológico más o menos universal, y que hayan conducido a la continua persecución personal de su autor durante los últimos 28 años.

Lo que Hamer plantea modifica radicalmente la visión convencional acerca de la enfermedad, de una manera tan revolucionaria que ataca los cimientos más elementales de la ideología médica. 
Para Hamer la enfermedad representa una respuesta natural del cerebro a una amenaza o trauma externo, y forma parte esencial del programa de supervivencia de la especie.
 La idea de Hamer –mal que pese a sus detractores absolutistas- está sustanciada por un denso “corpus” de investigación teórica y clínica que va desde la embriología hasta el escaneo cerebral. 
Aunque uno pueda no coincidir con todas las ideas de Hamer – que no incluyen la influencia cultural y psicolingüistica sobre la enfermedad- si uno estudia en profundidad sus trabajos, no queda duda alguna que deben ser observados con sumo respeto y posibilidades de viabilidad en un porcentaje sumamente elevado.

Mucho se ha escrito en nuestro idioma al respecto, incluyendo la obra del propio Hamer.
 Para la persona interesada puedo recomendar, además de las mencionadas, la obra del Dr.Fernando Callejón –y asociados-, quien realiza una revisión sumamente seria e imparcial y aporta asimismo los elementos psicológicos que pudieran estar faltando en la teoría original de Hamer. 
Este médico argentino no sólo ha realizado una investigación muy clara y fundamentada, sino que además tiene una inusual bonhomía y generosidad y ha puesto sus trabajos a libre disposición del público en su Sitio Web, sede virtual de la Asociación Argentina de Medicina Psicobiológica-


Allí los lectores interesados podrán recabar valiosa información acerca del tema, incluyendo libros y artículos de libre lectura.

Tuesday, October 21, 2014

Wikipedia,Fanáticos, charlatanes y la nueva religión del Siglo XXI : En torno al Dr. Ryke Geerd Hamer

En otra oportunidad ya he alertado en cuanto al cuidado que hay que tener en tomar como fidedigna la información de Wikipedia, especialmente en todo cuanto se refiere a las medicinas que no están encuadradas dentro del sistema oficial -y mundial- de la medicina basada en los medicamentos de síntesis química. En el artículo correspondiente al Dr. Ryke Geerd Hamer, hay información errónea y, hasta que se demuestre lo contrario, malintencionada. Entre muchas mentiras y medias verdades aparece esta perla:

"En 1996 Hamer saltó a los titulares por la muerte de una niña de 7 años, Olivia PilharLos padres de la niña fueron encarcelados por haber retirado a la niña de la medicina basada en evidencia para que fuera tratada por Hamer."

Adjunto abajo una foto en que se verá -la segunda de la derecha- a la señorita Olivia Pilhar, a quien se la vé muy saludable.



El Dr.Hamer se encuentra a la derecha de la joven.
Con qué nivel de confianza podemos leer lo demás que se dice del Dr. Hamer frente a un error tan burdo como el que estamos mencionando?

La nueva religión del Siglo XXI, se llama "Ciencia". El problema es que la medicina, no es una ciencia a la manera que lo son la física o las matemáticas, sino que es una disciplina que se basa en el método científico, que no es lo mismo. Ya hace muchos años el gran maestro español Dr.López Ibor decía: "Toda prescripción médica es un acto experimental". Algo que cualquier profesional de la salud con algo de conocimiento y experiencia y un par de dedos de frente debe saber perfectamente. Muchos de los que atacan al Dr. Hamer, cuando se les demuestra las barbaridades que se cometen con los falsos diagnósticos y con tratamientos equivocados dentro de la medicina oficial, se defienden diciendo:"Es que la medicina no es una ciencia exacta" Entonces no es ciencia, señores. Imagínense ustedes si un Ingeniero alegara este argumento frente a un edificio que se derrumba por un mal cálculo realizado por él? ¿Por qué no se aplica la misma vara para todos? Si un paciente de cáncer fallece bajo la atención de una medicina no amparada por el sistema oficial, el comentario es: "ha sido asesinado". Si un paciente de cáncer muere atendido por el método de la medicina oficial, la noticia es "Hicimos todo lo que pudimos y agotamos todos los recursos".

En Internet hoy, hay una extensa cantidad de palurdos pseudocientíficos que a la manera de los fanáticos de la edad media que iban a vocear en las ejecuciones de la Inquisición, defienden el sistema oficial de medicina a veces sin saber distinguir la ubicación del hígado con la del páncreas. Son los esclavos del lavado de cerebro y del condicionamiento de los poderes de turno, llámese antes Religión, o ahora "ciencia".
La Ciencia es una eficiente interpretación del mundo, sin lugar a dudas, pero no es sinónimo de "verdad" absoluta.

Del otro lado tenemos a los charlatanes que en sus seminarios, libros y conferencias, hablan de "medicina cuántica" o intentan transpolar algunos conceptos filosóficos aislados de esta disciplina de la física de una manera tan chapucera que da náuseas. Para hablar con propiedad y criterio de Cuántica hace falta tener una cantidad -y una calidad-de conocimientos matemáticos y físicos, que hacen que la mayoría de los individuos con un mínimo de sentido común nos cuidemos "muy mucho" de meternos en esas honduras para no confundir o manipular al prójimo, quedando objetivamente además como completos idiotas frente a alguien que verdaderamente conozca el tema el tema en profundidad (lo que significa estadísitcamente, poquísima gente en el mundo)

Estamos en una época muy particular.
El sentido común no sólo es el menos común de los sentidos, el criterio se ha perdido de una manera vergonzosa y la gente anda sin rumbo y a los tumbos, como tábanos sin cabeza.

Todos los días recibe uno información absurda -de un lado u otro del espectro ideológico- hay que desarrollar el Criterio para hablar con propiedad y no hacerle el caldo gordo ni a los unos ni a los otros.

Lo que funciona, funciona, llámese "medicina oficial" o "chamanismo", y lo que no funciona no funciona, aunque este avalado por todos los poderes de turno y amparado por la ingente maquinaria económica que se mueve detrás de casi todo en este mundo. 

Dr.Manuel Gerardo Monasterio




Friday, October 17, 2014

El Proyecto Sentido por Mariana Anchorena

El proyecto/sentido es la expectativa inconsciente que los padres transmiten al niño.
Está orientado a reparar los traumas no manifiestos del árbol genealógico y
ligado con el sobrevivir y adaptarse lo mejor posible  al mundo circundante, en concordancia con los mandatos del clan familiar.

 El bebe deberá, desde su vida intra-uterina, absorber toda la
historia del linaje al que intenta pertenecer. Llegará al mundo con  los
sueños e ideales proyectados de manera inconsciente en su persona, con todo lo que
ello implica a veces en términos de culpabilidad, sufrimiento e inferioridad,
búsqueda ideal de la perfección , etc.

 En gran medida estos proyectos que los padres  transmiten al bebé en el momento del desarrollo biológico ,  toman el sentido de los proyectos de los progenitores, así como sus experiencias vivenciales  durante nueve meses previos al embarazo  hasta el estadio neurofisiológico de tres años aproximadamente.

Cuando un consultante descubre su proyecto sentido y la importancia que tiene en su vida, automáticamente siente una liberación y toma conciencia del porque de sus tendencias ,de sus problemas, de repetir ciertas relaciones y patrones de conducta.  Descubre que esos patrones NO eran suyos, sino improntas transgeneracionales .
 Hay diversas posibilidades de proyecto sentido,  diversos programas que son revividos por una fuerza del inconciente-, y sostenidos por la fidelidad al clan familiar.  Descubrir y  resolver  este programa primigenio, es imprescindible para poder vivir nuestro proyecto de vida libremente y sin condicionamientos ajenos  nuestra individualidad.
Marc Frechet: “padre” del proyecto sentido

Marc Fréchet descubrió esta noción de proyecto/sentido gracias a su propia historia. El decía que su vida había empezado  partir  de 18 meses de cárcel.
 Su historia es la siguiente: Frechet fue concebido al final de la 2ª Guerra Mundial, 1945. Su madre, que había hecho cosas no muy claras durante la guerra, tenía que ser juzgada y encarcelada. Así que los padres de Marc Fleché tienen la idea siguiente: si ella está embarazada el jurado quizá sea más indulgente y las condiciones en la prisión más favorables.
                                                                                                                                                                                                                                                             
Marc Fréchet es concebido con la idea de, o bien evitar la cárcel a su madre, o que la estancia allí le fuera más confortable. Paso los 9 meses de su vida fetal en prisión, su madre lo tuvo en la cárcel y, cuando salió, tenía 9 meses.

Este clima de concepción y los nueve primeros meses de vida,  condicionaron su vida entera. El explicaba que su madre había hecho un niño porque lo necesitaba, para que la existencia fuera más confortable para ella, pero en realidad, le daba lo mismo. Decía que, durante los primeros nueve meses de vida, estuvo rodeado de mujeres que se ocupaban de él, menos su madre. En su vida siempre estuvo acompañado, pero solo.

Así que Marc Fréchet fue concebido con el proyecto de liberar a su madre



Mariana Anchorena
Acompañante en Biodescodificación Genealógica




Entrevista de Marta Texidó al Dr.Joe Dispenza



Joe Dispenza tiene 50 años es natural de Nueva Jersey, vive en las afueras de Seattle, viajando constantemente por todo el mundo para ofrecer sus descubrimientos. Se especializó en cardiopatía e imagen cerebral. Es profesor en la Universidad de Atlanta. .

¿Cómo comenzó a interesarse y especializarse en la plasticidad neuronal?

Desde siempre me interesé en el potencial humano desde el punto de vista científico y espiritual. Creo que hay más en nosotros de lo que expresamos, entonces cuando empecé a estudiar la reemisión espontánea de las enfermedades, lo que me sucedió y enfrentar la posibilidad de no volver a caminar y trabajando e investigando sobre la conexión mente cuerpo empecé a ver, a darme cuenta que tenemos una habilidad natural para el cambio y que el cerebro y nuestras células y el cuerpo nos seguirán si nos colocamos en el correcto estado mental y si somos capaces de mantener ese estado mental por un período de tiempo extenso, tanto nuestras conexiones neuronales comienzan a reorganizarse y a reflejar una nueva mente.
Así que creo que sucedió más que nada de mi experiencia de la vida y de vivirla.

Podría contarnos un poco de la interfaz cuerpo mente?
La manera más simple de explicarlo es que cada vez que tenemos pensamientos producimos un químico y si tenemos un pensamiento grandioso o alegre, producimos químicos que nos van a hacer sentir grandiosos y felices. Por lo tanto, en el elemento etéreo llamado pensamiento activa circuitos en el cerebro para producir químicos que le envía señales al cuerpo para que podamos sentir de manera exacta a nuestro pensamiento. Esto también significa que si tenemos un pensamiento negativo o que nos deprecia nos hará sentir infelices o disminuidos. El momento en que empezamos a sentirnos de la misma forma en que pensamos, esa química produce una cierta continuidad de cambio en el cuerpo y cuando nos empezamos a sentir de esa forma porque el cerebro está en constante comunicación con el cuerpo, comenzamos a pensar de la forma en que nos sentimos y a sentir lo que pensamos y este pensar-sentir sentir-pensar crea nuestro estado de ser. Entonces, comenzamos a memorizar estados emocionales que se vuelven parte de la personalidad y la persona que ha estado sintiendo y pensando que es infeliz y miserable, inseguro, cuando decimos “yo soy tal cosa” es cuando decimos que la mente y el cuerpo están trabajando juntos. Entonces si durante 20 años esa persona ha repetido y memorizado ese estado de infelicidad o negatividad, a la edad de los 35 años el 90% de la persona se mantiene en un programa subconsciente que memoriza nuestras actitudes, comportamientos y se transforma en lo que somos. ESE CICLO DE PENSAR Y SENTIR es que le enseña al cuerpo a memorizar estados emocionales que están en la mente subconsciente, y el cuerpo sabe mejor que la mente que ese es un hábito y el hábito más grande que tenemos es el hábito de ser nosotros mismos. Si seguimos activando el mismo gen, este gen termina agotándose y el cuerpo comienza a producir proteínas de peor calidad y se enferma.

¿Nos explicaría de qué manera es posible la regeneración de las células nerviosas? ¿Cómo se puede “desarrollar” el cerebro?

Es una buena pregunta porque científicos, neurocientíficos y biólogos me han dicho por más de 20 años que nuestro cerebro está cableado con una cierta cantidad de células nerviosas, pero hoy los científicos han comenzado a entender que no sólo podemos cambiar los circuitos de nuestro cerebro sino que también podemos regenerar las células en nuestro cerebro. El aprendizaje se trata de crear nuevas conexiones. Cada vez que tenemos una nueva experiencia grupos de células se reorganizan para reflejar lo que hemos aprendido de nuestro entorno. Ahora si no aprendemos nada nuevo y no tenemos ninguna experiencia nueva significa que el cerebro permanece literalmente igual, eso significa que si realizas las mismas acciones y piensas lo mismo tu cerebro no cambia; pero nadie vive su vida en secreto, repitiendo las mismas acciones todo el tiempo y esperando que su vida cambie. Cuando empezamos a tener nuevas experiencias, la repetición de ser capaz de crear nuevas experiencias no sólo organiza el cerebro en circuitos sino que las últimas investigaciones demuestran que mientras el entorno cambie nuestro comportamiento continúa modificándose. Ciertas áreas del cerebro crean lo que se conoce como neurogénesis, que es la formación de nuevas células nerviosas. Y esa es una gran promesa para el ser humano porque cuando vivimos en estrés, en un estado de sobrevivencia, que nos afecta y comienza a destruir nuestras células nerviosas. Los últimos experimentos en Princeton han demostrado que el cerebro se puede regenerar. ¿Se puede desarrollar el cerebro? ¿cómo?
Bueno el desarrollo del cerebro debe venir de aprender cosas, personalizarlas para que puedas tener una nueva experiencia Tenemos 3 cerebros que deben pasar por los pasos de pensar a hace a ser. Pero si no aplicas lo aprendido, si no lo demuestras, si no cambias tu comportamiento de alguna forma nunca vas a tener una nueva experiencia y la mente y el cuerpo no van a cambiar en consecuencia. Y cuando tenemos esta nueva experiencia es cuando el cerebro se reorganiza, pero no basta con tener la experiencia una vez, tenemos que ser capaces de repetirla y cuando somos capaces de hacer eso es cuando desarrollamos completamente nuestro cerebro porque hemos creado una unidad entre nuestros 3 cerebros y nos movemos a nuestro estado de ser.

¿Es posible que nuestros pensamientos se conviertan en materia? ¿Cómo es la relación de pensar o sentir y sintetizar moléculas, enviar señales?

De acuerdo al modelo físico del quantum el pensamiento y la materia están absolutamente correlacionados, no son entidades separadas.
No hay ningún experimento en física cuántica donde el observador no esté presente, lo que significa que la mente subjetiva literalmente tiene un efecto en el mundo objetivo, ¿Es posible entonces hacer que nuestra mente trabaje mejor? Si empezamos a crear nuevos estados mentales ¿podemos tener más control sobre la materia? Si tenemos más control sobre la materia, tenemos más control sobre nuestro destino. Entonces existe una estrecha relación entre el pensamiento y la materia porque los pensamientos se transforman en materia. Y si nuestra mente subjetiva puede observar un resultado, observar un destino que deseamos entonces podríamos realmente empezar a tener más control de nuestra vidas. El pensamiento es la carga eléctrica y nuestro sentimiento es la carga magnética en el campo cuántico, entonces lo que piensas y lo que sientes crea un campo electromagnético que literalmente comienza a interactuar con todas las partículas.

Usted habla también de la “plasticidad genética” ¿a qué alude?

Plasticidad genética significa que al igual que en el cerebro, hay ciertas áreas de nuestro genes que son muy plásticas, cambiables, que podemos tener algunos genes encendidos y otros apagados, y los mantenemos así dependiendo de cómo pensamos y sentimos. Por ende cambiamos nuestros sentimientos y pensamientos, en la misma correlación en que podemos apagar viejos genes y encender nuevos genes.

¿Qué elemento le daba a usted la confianza o la esperanza de que es posible la remisión de enfermedades aparentemente incurables?

Creo que la primera exposición que tuve fue mi propia experiencia personal. Me tuve que enfrentar a algo muy serio y con muy mal pronóstico, tenía mi espalda totalmente quebrada y ahí fue cuando empecé a hacer cambios personales en mi interior y noté que mi cuerpo respondía poco a poco. Me juré a mi mismo que si lograba volver a caminar alguna vez pasaría el resto de mi vida estudiando las conexiones mente-cuerpo y el potencial humano. Debido a eso al empezar a estudiar personas con distintas enfermedades como cáncer, diabetes, depresión etc cuando empecé a entrevistarlas empecé a ver la evidencia del camino que habían tomado para mejorarse. Como resultado para poder entender la correlación, volví a estudiar y obtuve el título en neurociencia para poder explicar lo que sucede en el cuerpo y en la mente.

¿Podría describir desde dónde surge esa certeza a la que accedió? ¿De qué se fue dando cuenta? ¿Qué confirmó? ¿Qué lo sorprendió? ¿Qué descartó o desechó?
Otra pregunta muy buena. Tengo una mente muy científica y me gusta ver evidencia y debido a que soy alguien analítico no puedo tan sólo abrazar una filosofía y luego no empezar a investigar si el resultado está en realidad sucediendo. He descartado muchas cosas en que la gente cree. Comencé a ver que los seres humanos somos unas maravillas con una gran habilidad para inventar y crear, entonces cuando las personas enfrentan una crisis o una situación difícil en sus vidas creo que es la primera vez en que se toman en serio el cambio y cuando nos tomamos en serio el hecho de querer hacer un cambio personal empezamos a buscar la persona que realmente queremos ser, y a saber qué no queremos más ser, ni sentir, ni actuar. Ese es el proceso de desaprendizaje de cambio, tenemos que desaprender nuestros pensamientos, acciones y sentimientos. Luego la idea de reinventarnos de reinventar una nueva célula, de volvernos alguien más es completamente posible si entiendes con algo de ciencia y filosofía cómo eso es posible. La gente se puede literalmente convertir en alguien más gracias a que nuestro cerebro es tan adaptable y cambiable. El proceso de desaprendizaje y de volver a aprender rompe circuitos en el cerebro y se reinventa o aflora, esto va más allá del pensamiento positivo. Esto no se trata de algún principio sicológico de pensar positivo, porque la mayoría de la gente que piensa positivo siente de forma negativa. Esto se trata de reacondicionar el cuerpo hacia una nueva mente y hacer que el cerebro funcione en frecuencias diferentes para crear una nueva mente y cada vez que el cerebro trabaje de manera diferente estamos creando una nueve mente. Ahora para poder ser capaz de mantener ese estado de mente y cuerpo independiente de las circunstancias en nuestra vida permite que el cuerpo y la mente influencien no sólo nuestra salud sin de muchas formas. Fue un proceso paso a paso confirmar mis creencias de que esto es posible y al mismo tiempo empezar a descartar ciertas creencias y sé que no es un proceso fácil el de cambiar, pero es posible cambiar si la necesidad de que estemos en una crisis.

¿Por qué enfermamos? ¿Cuál es el sentido de la enfermedad?

Suelen decir que los genes causan enfermedades y en cierto grado eso es cierto. Un compañero años atrás empezó a decir que en realidad no son realmente los genes que crean la enfermedad, sino el ambiente que activa los genes que causan la enfermedad y nuevamente hasta cierto punto eso es absolutamente verdad.

Pero, ¿por qué entonces cuando dos personas están expuestas a los mismos genes y ambiente, a una le da cáncer y a la otra no?
Debe haber sin duda algún tipo de orden interno de lo que sucede, podríamos decir entonces que es el ambiente interno en el que manejamos nuestra propia química, y que hay cierto ambiente externo que causa que ciertos genes produzcan la enfermedad, entonces nos enfermamos porque vivimos en estado de estrés, 90 % de las personas que recurren a un centro hospitalario en el mundo occidental lo hacen en relación a un desorden relacionado al estrés, y el estrés es cuando vivimos en un estado de sobrevivencia, lo que significa que vivimos muy enojados en nuestro ambiente.

Es el estrés el que comienza a motivar enormes cantidades de energía para que el cuerpo enfrente una situación de emergencia en el ambiente, para que se ocupe de algo en nuestro mundo externo del que nos tenemos que proteger. Esos químicos del estrés son los que continúan movilizando gran cantidad de energía, y quedamos sin energía para protección interna. La base es el orden y el balance interno y la respuesta al estrés derrumba nuestro cuerpo y el balance químico normal. Si continuamos haciendo lo mismo, nunca podremos recategorizar ese orden… . El hecho de no ser capaces de apagar el nivel de estrés comienza a producir la enfermedad y si esos campos de estrés que están conectados a las emociones de enojo, tristeza, frustración, dolor y miedo, comienzan a desregular los genes, el cuerpo crea la enfermedad.

Entonces la pregunta claramente es: ¿cómo nos salimos de esto?

Cuando empezamos a pensar sobre un hecho futuro y nos preparamos para él, esperamos que el evento suceda o se anticipe. Encendemos la respuesta al estrés y si nos obsesionamos con una experiencia pasada que sucedió digamos hace 25 años y comenzamos a recordarla producimos exactamente la misma química en el cerebro y en el cuerpo. Lo que la gente no sabe es que cuando empezamos a pensar sobre el futuro y a anticipar el paso siguiente y a prepararnos, comenzamos a derrumbar el equilibrio químico y corporal y producimos la enfermedad. Entonces la pregunta es si nuestro pasado nos puede enfermar, ¿puede también mejorarnos?

Sí, es muy simple. Lo que nos hace tan creativos como seres humanos es que podemos literalmente cambiar de opinión en cuestión de segundos y pasar de la felicidad a la tristeza, y cuando sentimos felicidad o amor, ese sentimiento se refleja de hecho en el cuerpo. Condicionamos el cuerpo a los estados de felicidad, sin embargo la mayoría de las personas condiciona el cuerpo al dolor y al sufrimiento y así es como el proceso de crear estados de felicidad requiere primero un reacondicionamiento del cuerpo a una nueva marca.
Mi trabajo es enseñarles a las personas a memorizar nuevos estados emocionales como también a que aprendan a eliminar de la memoria los estados emocionales negativos.

Las células del cuerpo aman la información nueva, aman los nuevos químicos y si mantenemos la misma química en nuestro cuerpo memorizamos un estado de mente y cuerpo, comenzamos a mantener un programa celular en el mismo nivel entonces pulsamos botones genéticos que hemos heredado de nuestros padres que pueden crear enfermedades. En otras palabras si no cambiamos nuestras mentes, tarde o temprano terminaremos pensando, actuando y sintiendo como nuestros padres. Sabemos desde un punto de vista científico que si la conciencia tiene influencia sobre el gen, que el gen está regulado por diferentes estados de conciencia. Cuando abrazamos nuevos y más altos estados de conciencia, mejores estados de amor, inspiración, alegría compasión, tales estados se volverán nuevos genes. Pero no es suficiente tener la experiencia una vez para empezar a sentir compasión, la célula tiene que reprogramarse y para eso tenemos que enseñarle a las personas a crear nuevos estados de la mente, a reprogramarse. El cambio es algo visceral, tenemos que sentirlo en el cuerpo, el conocimiento y la información son para la mente y las experiencias para el cuerpo, entonces debemos educar el cuerpo y la mente, y cuando las personas aprenden a hacerlo se empoderan, vuelven a tomar el poder.

Creo que la respuesta es muy simple.
En el pasado estudié con personas que habían estado enfermas. Todas creían que era un poder, una inteligencia que les había dado vida, y que podían conectar esa inteligencia al cuerpo y darle órdenes, era un mensaje de que esta inteligencia comenzaría a trabajar con ellos en el proceso y los ayudaría.
En segundo lugar es que las personas se daban cuenta de que había sido el propio descontrol y mal manejo de sus pensamientos, actitudes y sentimientos los que habían creado su enfermedad. En otras palabras, sus 20 años de sufrimiento habían comenzado a enfermarlos. Y tienen que empezar a ser ellos mismos, y es en el proceso de pensar y de sentir que comienza el cambio, comienzan a eliminar de la memoria esas emociones.

En tercer lugar estas personas inician el proceso de reinvención, a reinventarse a sí mismos pensando diferente, y cuando hacemos que el cerebro trabaje de manera diferente hemos construido una nueva mente.

A medida que se vuelven concientes a través del proceso de concentración comienzan a sentirse diferentes, entonces logran tener una nueve mente y cuerpo que trabajan juntos. Esta es la nueva plataforma para su futuro, en quienes ellos se transformarían. En el proceso introspección y concentración, en ese momento en el que nos volvemos tan concientes de nuestros sentimientos y de lo que hacemos es cuando el cerebro captura los pensamientos y sentimientos y se reorganiza. La persona entonces se sale de ese estado de sobrevivencia.

El proceso de cambio…podemos medir el cambio midiendo cómo el cuerpo y la mente responden. Recuerda que dijimos que el hábito es cuando el cuerpo se convierte en la mente, cambiar es sobreponer el pensamiento al sentimiento, el cambio es pensar sin importar las circunstancias de nuestra vida, mantener un estado modificado en el que la mente y el cuerpo trabajan juntos.

El proceso del cambio requiere familiarizarse con él, volverse consciente, conocernos, estar consciente de lo que era inconsciente.
Si ese 90% de quienes somos existe en un programa automático en el subconsciente debemos sentarnos, observarnos, eliminar el entorno, entender cómo nos sentimos y empezar a volvernos conscientes de cómo nos sentimos, actuamos o pensamos a nivel del inconsciente y volverlo consciente, eso quiere decir la palabra meditación, familiarizarse.
Si eres capaz de reinventarte, memorizar estos nuevos estados de la mente y reacondicionar el cuerpo de acuerdo a ella, decimos que te haz familiarizado con una nueva célula.

¿Es posible generar estados de bienestar y felicidad? ¿Cómo?
Sí es muy simple. Lo que nos hace tan creativos como seres humanos es que podemos literalmente cambiar de opinión en cuestión de segundos y pasar de la felicidad a la tristeza, y cuando sentimos felicidad o amor, ese sentimiento se refleja de hecho en el cuerpo. Condicionamos el cuero a los estados de felicidad, sin embargo la mayoría de las personas condiciona el cuerpo al dolor y al sufrimiento y así es como el proceso de crear estados de felicidad requiere primero un reacondicionamiento del cuerpo a una nueva marca.
Mi trabajo es enseñarles a las personas a memorizar nuevos estados emocionales como también a que aprendan a eliminar de la memoria los estados emocionales negativos.

¿Cuál es el valor de los estados no ordinarios de conciencia en el proceso de reprogramación celular?
Las células del cuerpo aman la información nueva, aman los nuevos químicos y si mantenemos la misma química en nuestro cuerpo memorizamos un estado de mente y cuerpo, comenzamos a mantener un programa celular en el mismo nivel entonces pulsamos botones genéticos que hemos heredado de nuestros padres que pueden crear enfermedades. En otras palabras si no cambiamos nuestras mentes, tarde o temprano terminaremos pensando, actuando y sintiendo como nuestros padres. Sabemos desde un punto de vista científico que si la conciencia tiene influencia sobre el gen, que el gen está regulado por diferentes estados de conciencia. Cuando abrazamos nuevos y más altos estados de conciencia, mejores estados de amor, inspiración, alegría compasión, tales estados se volverán nuevos genes. Pero no es suficiente tener la experiencia una vez para empezar a sentir compasión, la célula tiene que reprogramarse y para eso tenemos que enseñarle a las personas a crear nuevos estados de la mente, a reprogramarse. El cambio es algo visceral, tenemos que sentirlo en el cuerpo, el conocimiento y la información son para la mente y las experiencias para el cuerpo, entonces debemos educar el cuerpo y la mente, y cuando las personas aprenden a hacerlo se empoderan, vuelven a tomar el poder.

¿Existen características o cualidades personales (fundamentales o coadyuvantes) en el proceso de cura?

Creo que la respuesta es muy simple.
En el pasado estudié con personas que habían estado enfermas. Todas creían que era un poder, una inteligencia que les había dado vida, y que podían conectar esa inteligencia al cuerpo y darle órdenes, era un mensaje de que esta inteligencia comenzaría a trabajar con ellos en el proceso y los ayudaría.
En segundo lugar es que las personas se daban cuenta de que había sido el propio descontrol y mal manejo de sus pensamientos, actitudes y sentimientos los que habían creado su enfermedad. En otras palabras, sus 20 años de sufrimiento habían comenzado a enfermarlos. Y tienen que empezar a ser ellos mismos, y es en el proceso de pensar y de sentir que comienza el cambio, comienzan a eliminar de la memoria esas emociones.

En tercer lugar estas personas inician el proceso de reinvención, a reinventarse a sí mismos pensando diferente, y cuando hacemos que el cerebro trabaje de manera diferente hemos construido una nueva mente.

A medida que se vuelven concientes a través del proceso de concentración comienzan a sentirse diferentes, entonces logran tener una nueve mente y cuerpo que trabajan juntos. Esta es la nueva plataforma para su futuro, en quienes ellos se transformarían. En el proceso introspección y concentración, en ese momento en el que nos volvemos tan concientes de nuestros sentimientos y de lo que hacemos es cuando el cerebro captura los pensamientos y sentimientos y se reorganiza. La persona entonces se sale de ese estado de sobrevivencia.

¿Cuál es su propuesta para cambiar hábitos nocivos, nuestra arquitectura, nuestros surcos, rutas y neuronales?
El proceso de cambio…,podemos medir el cambio midiendo cómo el cuerpo y la mente responden. Recuerda que dijimos que el hábito es cuando el cuerpo se convierte en la mente, cambiar es sobreponer el pensamiento al sentimiento, el cambio es pensar sin importar las circunstancias de nuestra vida, mantener un estado modificado en el que la mente y el cuerpo trabajan juntos.

El proceso del cambio requiere familiarizarse con él, volverse consciente, conocernos, estar consciente de lo que era inconsciente.
Si ese 90% de quienes somos existe en un programa automático en el subconsciente debemos sentarnos, observarnos, eliminar el entorno, entender cómo nos sentimos y empezar a volvernos conscientes de cómo nos sentimos, actuamos o pensamos a nivel del inconsciente y volverlo consciente, eso quiere decir la palabra meditación, familiarizarse.
Si eres capaz de reinventarte, memorizar estos nuevos estados de la mente y reacondicionar el cuerpo de acuerdo a ella, decimos que te has familiarizado con una nueva célula.

Foto: Entrevista de Marta Texidó al Dr.Joe Dispenza 

Joe Dispenza tiene 50 años es natural de Nueva Jersey, vive en las afueras de Seattle, viajando constantemente por todo el mundo para ofrecer sus descubrimientos. Se especializó en cardiopatía e imagen cerebral. Es profesor en la Universidad de Atlanta. .

¿Cómo comenzó a interesarse y especializarse en la plasticidad neuronal?

Desde siempre me interesé en el potencial humano desde el punto de vista científico y espiritual. Creo que hay más en nosotros de lo que expresamos, entonces cuando empecé a estudiar la reemisión espontánea de las enfermedades, lo que me sucedió y enfrentar la posibilidad de no volver a caminar y trabajando e investigando sobre la conexión mente cuerpo empecé a ver, a darme cuenta que tenemos una habilidad natural para el cambio y que el cerebro y nuestras células y el cuerpo nos seguirán si nos colocamos en el correcto estado mental y si somos capaces de mantener ese estado mental por un período de tiempo extenso, tanto nuestras conexiones neuronales comienzan a reorganizarse y a reflejar una nueva mente. 
Así que creo que sucedió más que nada de mi experiencia de la vida y de vivirla.

Podría contarnos un poco de la interfaz cuerpo mente? 
La manera más simple de explicarlo es que cada vez que tenemos pensamientos producimos un químico y si tenemos un pensamiento grandioso o alegre, producimos químicos que nos van a hacer sentir grandiosos y felices. Por lo tanto, en el elemento etéreo llamado pensamiento activa circuitos en el cerebro para producir químicos que le envía señales al cuerpo para que podamos sentir de manera exacta a nuestro pensamiento. Esto también significa que si tenemos un pensamiento negativo o que nos deprecia nos hará sentir infelices o disminuidos. El momento en que empezamos a sentirnos de la misma forma en que pensamos, esa química produce una cierta continuidad de cambio en el cuerpo y cuando nos empezamos a sentir de esa forma porque el cerebro está en constante comunicación con el cuerpo, comenzamos a pensar de la forma en que nos sentimos y a sentir lo que pensamos y este pensar-sentir sentir-pensar crea nuestro estado de ser. Entonces, comenzamos a memorizar estados emocionales que se vuelven parte de la personalidad y la persona que ha estado sintiendo y pensando que es infeliz y miserable, inseguro, cuando decimos “yo soy tal cosa” es cuando decimos que la mente y el cuerpo están trabajando juntos. Entonces si durante 20 años esa persona ha repetido y memorizado ese estado de infelicidad o negatividad, a la edad de los 35 años el 90% de la persona se mantiene en un programa subconsciente que memoriza nuestras actitudes, comportamientos y se transforma en lo que somos. ESE CICLO DE PENSAR Y SENTIR es que le enseña al cuerpo a memorizar estados emocionales que están en la mente subconsciente, y el cuerpo sabe mejor que la mente que ese es un hábito y el hábito más grande que tenemos es el hábito de ser nosotros mismos. Si seguimos activando el mismo gen, este gen termina agotándose y el cuerpo comienza a producir proteínas de peor calidad y se enferma. 

¿Nos explicaría de qué manera es posible la regeneración de las células nerviosas? ¿Cómo se puede “desarrollar” el cerebro?

Es una buena pregunta porque científicos, neurocientíficos y biólogos me han dicho por más de 20 años que nuestro cerebro está cableado con una cierta cantidad de células nerviosas, pero hoy los científicos han comenzado a entender que no sólo podemos cambiar los circuitos de nuestro cerebro sino que también podemos regenerar las células en nuestro cerebro. El aprendizaje se trata de crear nuevas conexiones. Cada vez que tenemos una nueva experiencia grupos de células se reorganizan para reflejar lo que hemos aprendido de nuestro entorno. Ahora si no aprendemos nada nuevo y no tenemos ninguna experiencia nueva significa que el cerebro permanece literalmente igual, eso significa que si realizas las mismas acciones y piensas lo mismo tu cerebro no cambia; pero nadie vive su vida en secreto, repitiendo las mismas acciones todo el tiempo y esperando que su vida cambie. Cuando empezamos a tener nuevas experiencias, la repetición de ser capaz de crear nuevas experiencias no sólo organiza el cerebro en circuitos sino que las últimas investigaciones demuestran que mientras el entorno cambie nuestro comportamiento continúa modificándose. Ciertas áreas del cerebro crean lo que se conoce como neurogénesis, que es la formación de nuevas células nerviosas. Y esa es una gran promesa para el ser humano porque cuando vivimos en estrés, en un estado de sobrevivencia, que nos afecta y comienza a destruir nuestras células nerviosas. Los últimos experimentos en Princeton han demostrado que el cerebro se puede regenerar. ¿Se puede desarrollar el cerebro? ¿cómo?
Bueno el desarrollo del cerebro debe venir de aprender cosas, personalizarlas para que puedas tener una nueva experiencia Tenemos 3 cerebros que deben pasar por los pasos de pensar a hace a ser. Pero si no aplicas lo aprendido, si no lo demuestras, si no cambias tu comportamiento de alguna forma nunca vas a tener una nueva experiencia y la mente y el cuerpo no van a cambiar en consecuencia. Y cuando tenemos esta nueva experiencia es cuando el cerebro se reorganiza, pero no basta con tener la experiencia una vez, tenemos que ser capaces de repetirla y cuando somos capaces de hacer eso es cuando desarrollamos completamente nuestro cerebro porque hemos creado una unidad entre nuestros 3 cerebros y nos movemos a nuestro estado de ser. 

¿Es posible que nuestros pensamientos se conviertan en materia? ¿Cómo es la relación de pensar o sentir y sintetizar moléculas, enviar señales?

De acuerdo al modelo físico del quantum el pensamiento y la materia están absolutamente correlacionados, no son entidades separadas. 
No hay ningún experimento en física cuántica donde el observador no esté presente, lo que significa que la mente subjetiva literalmente tiene un efecto en el mundo objetivo, ¿Es posible entonces hacer que nuestra mente trabaje mejor? Si empezamos a crear nuevos estados mentales ¿podemos tener más control sobre la materia? Si tenemos más control sobre la materia, tenemos más control sobre nuestro destino. Entonces existe una estrecha relación entre el pensamiento y la materia porque los pensamientos se transforman en materia. Y si nuestra mente subjetiva puede observar un resultado, observar un destino que deseamos entonces podríamos realmente empezar a tener más control de nuestra vidas. El pensamiento es la carga eléctrica y nuestro sentimiento es la carga magnética en el campo cuántico, entonces lo que piensas y lo que sientes crea un campo electromagnético que literalmente comienza a interactuar con todas las partículas.

Usted habla también de la “plasticidad genética” ¿a qué alude?

Plasticidad genética significa que al igual que en el cerebro, hay ciertas áreas de nuestro genes que son muy plásticas, cambiables, que podemos tener algunos genes encendidos y otros apagados, y los mantenemos así dependiendo de cómo pensamos y sentimos. Por ende cambiamos nuestros sentimientos y pensamientos, en la misma correlación en que podemos apagar viejos genes y encender nuevos genes.

¿Qué elemento le daba a usted la confianza o la esperanza de que es posible la remisión de enfermedades aparentemente incurables? 

Creo que la primera exposición que tuve fue mi propia experiencia personal. Me tuve que enfrentar a algo muy serio y con muy mal pronóstico, tenía mi espalda totalmente quebrada y ahí fue cuando empecé a hacer cambios personales en mi interior y noté que mi cuerpo respondía poco a poco. Me juré a mi mismo que si lograba volver a caminar alguna vez pasaría el resto de mi vida estudiando las conexiones mente-cuerpo y el potencial humano. Debido a eso al empezar a estudiar personas con distintas enfermedades como cáncer, diabetes, depresión etc cuando empecé a entrevistarlas empecé a ver la evidencia del camino que habían tomado para mejorarse. Como resultado para poder entender la correlación, volví a estudiar y obtuve el título en neurociencia para poder explicar lo que sucede en el cuerpo y en la mente. 

¿Podría describir desde dónde surge esa certeza a la que accedió? ¿De qué se fue dando cuenta? ¿Qué confirmó? ¿Qué lo sorprendió? ¿Qué descartó o desechó?
Otra pregunta muy buena. Tengo una mente muy científica y me gusta ver evidencia y debido a que soy alguien analítico no puedo tan sólo abrazar una filosofía y luego no empezar a investigar si el resultado está en realidad sucediendo. He descartado muchas cosas en que la gente cree. Comencé a ver que los seres humanos somos unas maravillas con una gran habilidad para inventar y crear, entonces cuando las personas enfrentan una crisis o una situación difícil en sus vidas creo que es la primera vez en que se toman en serio el cambio y cuando nos tomamos en serio el hecho de querer hacer un cambio personal empezamos a buscar la persona que realmente queremos ser, y a saber qué no queremos más ser, ni sentir, ni actuar. Ese es el proceso de desaprendizaje de cambio, tenemos que desaprender nuestros pensamientos, acciones y sentimientos. Luego la idea de reinventarnos de reinventar una nueva célula, de volvernos alguien más es completamente posible si entiendes con algo de ciencia y filosofía cómo eso es posible. La gente se puede literalmente convertir en alguien más gracias a que nuestro cerebro es tan adaptable y cambiable. El proceso de desaprendizaje y de volver a aprender rompe circuitos en el cerebro y se reinventa o aflora, esto va más allá del pensamiento positivo. Esto no se trata de algún principio sicológico de pensar positivo, porque la mayoría de la gente que piensa positivo siente de forma negativa. Esto se trata de reacondicionar el cuerpo hacia una nueva mente y hacer que el cerebro funcione en frecuencias diferentes para crear una nueva mente y cada vez que el cerebro trabaje de manera diferente estamos creando una nueve mente. Ahora para poder ser capaz de mantener ese estado de mente y cuerpo independiente de las circunstancias en nuestra vida permite que el cuerpo y la mente influencien no sólo nuestra salud sin de muchas formas. Fue un proceso paso a paso confirmar mis creencias de que esto es posible y al mismo tiempo empezar a descartar ciertas creencias y sé que no es un proceso fácil el de cambiar, pero es posible cambiar si la necesidad de que estemos en una crisis. 

¿Por qué enfermamos? ¿Cuál es el sentido de la enfermedad?

Suelen decir que los genes causan enfermedades y en cierto grado eso es cierto. Un compañero años atrás empezó a decir que en realidad no son realmente los genes que crean la enfermedad, sino el ambiente que activa los genes que causan la enfermedad y nuevamente hasta cierto punto eso es absolutamente verdad.

Pero, ¿por qué entonces cuando dos personas están expuestas a los mismos genes y ambiente, a una le da cáncer y a la otra no? 
Debe haber sin duda algún tipo de orden interno de lo que sucede, podríamos decir entonces que es el ambiente interno en el que manejamos nuestra propia química, y que hay cierto ambiente externo que causa que ciertos genes produzcan la enfermedad, entonces nos enfermamos porque vivimos en estado de estrés, 90 % de las personas que recurren a un centro hospitalario en el mundo occidental lo hacen en relación a un desorden relacionado al estrés, y el estrés es cuando vivimos en un estado de sobrevivencia, lo que significa que vivimos muy enojados en nuestro ambiente. 

Es el estrés el que comienza a motivar enormes cantidades de energía para que el cuerpo enfrente una situación de emergencia en el ambiente, para que se ocupe de algo en nuestro mundo externo del que nos tenemos que proteger. Esos químicos del estrés son los que continúan movilizando gran cantidad de energía, y quedamos sin energía para protección interna. La base es el orden y el balance interno y la respuesta al estrés derrumba nuestro cuerpo y el balance químico normal. Si continuamos haciendo lo mismo, nunca podremos recategorizar ese orden… . El hecho de no ser capaces de apagar el nivel de estrés comienza a producir la enfermedad y si esos campos de estrés que están conectados a las emociones de enojo, tristeza, frustración, dolor y miedo, comienzan a desregular los genes, el cuerpo crea la enfermedad.

Entonces la pregunta claramente es: ¿cómo nos salimos de esto?

Cuando empezamos a pensar sobre un hecho futuro y nos preparamos para él, esperamos que el evento suceda o se anticipe. Encendemos la respuesta al estrés y si nos obsesionamos con una experiencia pasada que sucedió digamos hace 25 años y comenzamos a recordarla producimos exactamente la misma química en el cerebro y en el cuerpo. Lo que la gente no sabe es que cuando empezamos a pensar sobre el futuro y a anticipar el paso siguiente y a prepararnos, comenzamos a derrumbar el equilibrio químico y corporal y producimos la enfermedad. Entonces la pregunta es si nuestro pasado nos puede enfermar, ¿puede también mejorarnos?

Sí, es muy simple. Lo que nos hace tan creativos como seres humanos es que podemos literalmente cambiar de opinión en cuestión de segundos y pasar de la felicidad a la tristeza, y cuando sentimos felicidad o amor, ese sentimiento se refleja de hecho en el cuerpo. Condicionamos el cuerpo a los estados de felicidad, sin embargo la mayoría de las personas condiciona el cuerpo al dolor y al sufrimiento y así es como el proceso de crear estados de felicidad requiere primero un reacondicionamiento del cuerpo a una nueva marca. 
Mi trabajo es enseñarles a las personas a memorizar nuevos estados emocionales como también a que aprendan a eliminar de la memoria los estados emocionales negativos. 

Las células del cuerpo aman la información nueva, aman los nuevos químicos y si mantenemos la misma química en nuestro cuerpo memorizamos un estado de mente y cuerpo, comenzamos a mantener un programa celular en el mismo nivel entonces pulsamos botones genéticos que hemos heredado de nuestros padres que pueden crear enfermedades. En otras palabras si no cambiamos nuestras mentes, tarde o temprano terminaremos pensando, actuando y sintiendo como nuestros padres. Sabemos desde un punto de vista científico que si la conciencia tiene influencia sobre el gen, que el gen está regulado por diferentes estados de conciencia. Cuando abrazamos nuevos y más altos estados de conciencia, mejores estados de amor, inspiración, alegría compasión, tales estados se volverán nuevos genes. Pero no es suficiente tener la experiencia una vez para empezar a sentir compasión, la célula tiene que reprogramarse y para eso tenemos que enseñarle a las personas a crear nuevos estados de la mente, a reprogramarse. El cambio es algo visceral, tenemos que sentirlo en el cuerpo, el conocimiento y la información son para la mente y las experiencias para el cuerpo, entonces debemos educar el cuerpo y la mente, y cuando las personas aprenden a hacerlo se empoderan, vuelven a tomar el poder.

Creo que la respuesta es muy simple.
En el pasado estudié con personas que habían estado enfermas. Todas creían que era un poder, una inteligencia que les había dado vida, y que podían conectar esa inteligencia al cuerpo y darle órdenes, era un mensaje de que esta inteligencia comenzaría a trabajar con ellos en el proceso y los ayudaría.
En segundo lugar es que las personas se daban cuenta de que había sido el propio descontrol y mal manejo de sus pensamientos, actitudes y sentimientos los que habían creado su enfermedad. En otras palabras, sus 20 años de sufrimiento habían comenzado a enfermarlos. Y tienen que empezar a ser ellos mismos, y es en el proceso de pensar y de sentir que comienza el cambio, comienzan a eliminar de la memoria esas emociones.

En tercer lugar estas personas inician el proceso de reinvención, a reinventarse a sí mismos pensando diferente, y cuando hacemos que el cerebro trabaje de manera diferente hemos construido una nueva mente.

A medida que se vuelven concientes a través del proceso de concentración comienzan a sentirse diferentes, entonces logran tener una nueve mente y cuerpo que trabajan juntos. Esta es la nueva plataforma para su futuro, en quienes ellos se transformarían. En el proceso introspección y concentración, en ese momento en el que nos volvemos tan concientes de nuestros sentimientos y de lo que hacemos es cuando el cerebro captura los pensamientos y sentimientos y se reorganiza. La persona entonces se sale de ese estado de sobrevivencia. 

El proceso de cambio…podemos medir el cambio midiendo cómo el cuerpo y la mente responden. Recuerda que dijimos que el hábito es cuando el cuerpo se convierte en la mente, cambiar es sobreponer el pensamiento al sentimiento, el cambio es pensar sin importar las circunstancias de nuestra vida, mantener un estado modificado en el que la mente y el cuerpo trabajan juntos.

El proceso del cambio requiere familiarizarse con él, volverse consciente, conocernos, estar consciente de lo que era inconsciente. 
Si ese 90% de quienes somos existe en un programa automático en el subconsciente debemos sentarnos, observarnos, eliminar el entorno, entender cómo nos sentimos y empezar a volvernos conscientes de cómo nos sentimos, actuamos o pensamos a nivel del inconsciente y volverlo consciente, eso quiere decir la palabra meditación, familiarizarse. 
Si eres capaz de reinventarte, memorizar estos nuevos estados de la mente y reacondicionar el cuerpo de acuerdo a ella, decimos que te haz familiarizado con una nueva célula.

¿Es posible generar estados de bienestar y felicidad? ¿Cómo?
Sí es muy simple. Lo que nos hace tan creativos como seres humanos es que podemos literalmente cambiar de opinión en cuestión de segundos y pasar de la felicidad a la tristeza, y cuando sentimos felicidad o amor, ese sentimiento se refleja de hecho en el cuerpo. Condicionamos el cuero a los estados de felicidad, sin embargo la mayoría de las personas condiciona el cuerpo al dolor y al sufrimiento y así es como el proceso de crear estados de felicidad requiere primero un reacondicionamiento del cuerpo a una nueva marca. 
Mi trabajo es enseñarles a las personas a memorizar nuevos estados emocionales como también a que aprendan a eliminar de la memoria los estados emocionales negativos.

¿Cuál es el valor de los estados no ordinarios de conciencia en el proceso de reprogramación celular?
Las células del cuerpo aman la información nueva, aman los nuevos químicos y si mantenemos la misma química en nuestro cuerpo memorizamos un estado de mente y cuerpo, comenzamos a mantener un programa celular en el mismo nivel entonces pulsamos botones genéticos que hemos heredado de nuestros padres que pueden crear enfermedades. En otras palabras si no cambiamos nuestras mentes, tarde o temprano terminaremos pensando, actuando y sintiendo como nuestros padres. Sabemos desde un punto de vista científico que si la conciencia tiene influencia sobre el gen, que el gen está regulado por diferentes estados de conciencia. Cuando abrazamos nuevos y más altos estados de conciencia, mejores estados de amor, inspiración, alegría compasión, tales estados se volverán nuevos genes. Pero no es suficiente tener la experiencia una vez para empezar a sentir compasión, la célula tiene que reprogramarse y para eso tenemos que enseñarle a las personas a crear nuevos estados de la mente, a reprogramarse. El cambio es algo visceral, tenemos que sentirlo en el cuerpo, el conocimiento y la información son para la mente y las experiencias para el cuerpo, entonces debemos educar el cuerpo y la mente, y cuando las personas aprenden a hacerlo se empoderan, vuelven a tomar el poder.

¿Existen características o cualidades personales (fundamentales o coadyuvantes) en el proceso de cura?

Creo que la respuesta es muy simple.
En el pasado estudié con personas que habían estado enfermas. Todas creían que era un poder, una inteligencia que les había dado vida, y que podían conectar esa inteligencia al cuerpo y darle órdenes, era un mensaje de que esta inteligencia comenzaría a trabajar con ellos en el proceso y los ayudaría.
En segundo lugar es que las personas se daban cuenta de que había sido el propio descontrol y mal manejo de sus pensamientos, actitudes y sentimientos los que habían creado su enfermedad. En otras palabras, sus 20 años de sufrimiento habían comenzado a enfermarlos. Y tienen que empezar a ser ellos mismos, y es en el proceso de pensar y de sentir que comienza el cambio, comienzan a eliminar de la memoria esas emociones.

En tercer lugar estas personas inician el proceso de reinvención, a reinventarse a sí mismos pensando diferente, y cuando hacemos que el cerebro trabaje de manera diferente hemos construido una nueva mente.

A medida que se vuelven concientes a través del proceso de concentración comienzan a sentirse diferentes, entonces logran tener una nueve mente y cuerpo que trabajan juntos. Esta es la nueva plataforma para su futuro, en quienes ellos se transformarían. En el proceso introspección y concentración, en ese momento en el que nos volvemos tan concientes de nuestros sentimientos y de lo que hacemos es cuando el cerebro captura los pensamientos y sentimientos y se reorganiza. La persona entonces se sale de ese estado de sobrevivencia. 

¿Cuál es su propuesta para cambiar hábitos nocivos, nuestra arquitectura, nuestros surcos, rutas y neuronales?
El proceso de cambio…,podemos medir el cambio midiendo cómo el cuerpo y la mente responden. Recuerda que dijimos que el hábito es cuando el cuerpo se convierte en la mente, cambiar es sobreponer el pensamiento al sentimiento, el cambio es pensar sin importar las circunstancias de nuestra vida, mantener un estado modificado en el que la mente y el cuerpo trabajan juntos.

El proceso del cambio requiere familiarizarse con él, volverse consciente, conocernos, estar consciente de lo que era inconsciente. 
Si ese 90% de quienes somos existe en un programa automático en el subconsciente debemos sentarnos, observarnos, eliminar el entorno, entender cómo nos sentimos y empezar a volvernos conscientes de cómo nos sentimos, actuamos o pensamos a nivel del inconsciente y volverlo consciente, eso quiere decir la palabra meditación, familiarizarse. 
Si eres capaz de reinventarte, memorizar estos nuevos estados de la mente y reacondicionar el cuerpo de acuerdo a ella, decimos que te has familiarizado con una nueva célula.

Joe Dispensa Entrevistado en "La Vanguardia"



"Si quieres otra realidad, debes convertirte en otra persona"

La ley del cambio

Nuestra personalidad y nuestra realidad se han construido según cómo pensamos, actuamos y sentimos. Con mucha disciplina, entrando a diario en nuestro cerebro, podemos, según Dispenza, crear nuestra realidad. En su último libro, Deja de ser tú (Urano), explica cómo y propone un aprendizaje de cuatro semanas. Quiropráctico con una vida de película, tuvo una lesión que le hizo replantearse las capacidades de nuestro cerebro y se convirtió en bioquímico y neurocientífico. "Primero investigué las remisiones espontáneas de enfermedades y analicé qué tenían en común las personas que lo conseguían. Luego decidí reproducirlo, y todo lo que es reproducible se convierte en una ley".
Lleva años defendiendo que podemos llegar a controlar nuestra mente y la realidad.
La mente determina la experiencia exterior, porque todo se reduce a campos de energía, de modo que nuestro pensamiento altera constantemente nuestra realidad. Es posible cambiar circunstancias de la realidad si sabemos cómo.

Pues debo de ser muy torpe.
Si sostiene los mismos pensamientos, si lleva a cabo las mismas acciones y vive con los mismos sentimientos y emociones, su cerebro y su cuerpo seguirán igual; pero cada vez que aprende algo establece nuevas conexiones que cambian físicamente su cerebro.

Nos pasamos la vida aprendiendo.
No todos. Aun así, aprender no es suficiente. Has de aplicar lo que aprendes, y cuando empiezas a experimentar las emociones de esa experiencia, entonces literalmente das nuevas señales a tus neuronas y creas nuevas sinapsis: a eso se le llama evolución.

Si fuera tan sencillo...
Siempre estamos creando un futuro, lo que pasa es que solemos crear el mismo, reafirmamos nuestra personalidad. Vivimos dirigidos por una serie de pensamientos, conductas y reacciones emocionales memorizados (temor, culpabilidad, falta de autoestima, enfado, prejuicios...) que son muy adictivos y que funcionan como programas informáticos instalados en el subconsciente.

¿Dónde está el cambio?
En ser más grande que las circunstancias de tu vida. O somos las víctimas de nuestra realidad o los creadores.

Suena a autoayuda.
Si analizamos grandes personajes de nuestra historia, vemos que todos ellos pensaron e imaginaron un futuro el suficiente número de veces como para que su cerebro cambiara literalmente, hasta el punto de que sentían esa experiencia deseada como si ya hubiera sucedido.

Primero crearon el cambio en ellos.
Cambiar significa ir más allá del entorno, el cuerpo y el tiempo. Podemos hacer que el pensamiento sea más real que cualquier otra cosa, y lo hacemos a diario: si estamos conduciendo por una carretera pero concentrados en nuestro pensamiento, no vemos la carretera, no sentimos nuestro cuerpo y no sabemos cuánto tiempo ha pasado. Ese estado es el que utilizamos para crear.

Absortos en la emoción.
Pero la mayoría de las personas están pensando en sus problemas en lugar de pensar en las posibilidades.

Pero pensar en algo no lo hace real.
Una vez tenemos una visión, nuestro comportamiento debe responder a las intenciones. La mente y el cuerpo deben trabajar juntos. Tenemos que escoger de manera distinta de como hemos escogido para que pueda suceder algo nuevo. Si quiere crear una nueva realidad personal, tiene que, literalmente, convertirse en otra persona.

¿Cómo?
Mediante un programa de meditación desligada de misticismos que pretende que el cerebro y el cuerpo no respondan de forma predecible. Se trata de que se convierta en una habilidad, de abrir la puerta del sistema operativo, de todos esos programas subconscientes donde realmente ocurre el cambio.

Pongamos, por ejemplo, la ansiedad...
El escáner de alguien con ansiedad o con depresión es el mismo: el cerebro empieza a segregar química como si eso que teme la persona estuviera sucediendo, y con el tiempo esa química se convierte en adictiva.

¿Cómo salir del bucle?
Meditación significa familiarizarse con. Si haces conscientes tus pensamientos y tus hábitos automáticos y observas las emociones, empiezas a objetivizar tu mente subconsciente. Si te familiarizas con los aspectos de ti mismo que crean la ansiedad (o lo que quieras cambiar), durante la vigilia observarás cuándo empiezas a sentirte de esa manera y serás capaz de cambiarlo.

¿Y a partir de ahí?
... Si decides quién quieres ser, cuál es el gran ideal de ti mismo, qué pensamientos quieres tener, qué conductas quieres demostrar, qué emociones quieres experimentar; si te recuerdas cada día quién ya no quieres ser y quién quieres ser y empiezas a pensar en nuevas formas de ser, cuanto más pienses en ello y más lo planifiques, más estás instalando los circuitos en el cerebro.

Cuanto más te observes a ti mismo, menos serás tú mismo.
Exacto. Si podemos enseñar al cuerpo a confiar en el futuro y vivir en la alegría, creamos nuevas conexiones. Una atención clara y una emoción elevada cambian el destino. Pero requiere disciplina. El simple pensamiento positivo no funciona, porque la negatividad está instalada en el subconsciente. Los cambios verdaderos consisten en ser consciente de tus reacciones inconscientes.

¿Y qué dicen sus colegas?, ¿le tratan de esotérico, chiflado...?
Hay una división intelectual: tengo colegas que defienden teorías similares a las mías y somos tan científicos como los que defienden modelos más convencionales. Pero yo propongo que se pruebe y se juzgue.

Bruce Lipton responde

Bruce Lipton Responde

"Me enseñaron que los genes controlan la vida, que en ellos se inscriben todas nuestras capacidades y características, pero es falso."

¿Del todo?
No somos víctimas de nuestra genética, en realidad es el ADN el que está controlado por el medio externo celular.

¿Qué significa eso?
La célula es la vida. Hablar de una célula es como hablar de una persona. Nosotros recibimos la información a través de los cinco sentidos y las células reciben las señales del entorno a través de los receptores que captan la información. El ADN es controlado por señales que vienen desde fuera de la célula, incluyendo mensajes energéticos de nuestros propios pensamientos, tanto los positivos como los negativos.

¿Somos lo que vivimos y pensamos?
Sí, y cambiar nuestra manera de vivir y de percibir el mundo es cambiar nuestra biología. Los estudios que empecé hace cuarenta años demuestran que las células cambian en función del entorno, es lo que llamamos epigenética. Epi significa por encima de la genética, más allá de ella.

¿Y?
Según el entorno y como tú respondes al mundo, un gen puede crear 30.000 diferentes variaciones. Menos del 10% del cáncer es heredado, es el estilo de vida lo que determina la genética.

¿Es el entorno el que nos define?
Aprendemos a vernos como nos ven, a valorarnos como nos valoran. Lo que escuchamos y vivimos nos forma. No vemos el mundo como es, vemos el mundo como somos. Somos víctimas de nuestras creencias, pero podemos cambiarlas.

Pero las creencias están inscritas en lo más profundo de nuestro subconsciente.
Cierto. El subconsciente es un procesador de información un millón de veces más rápido que la mente consciente y utiliza entre el 95% y el 99% del tiempo la información ya almacenada desde nuestra niñez como un referente. Por eso cuando decidimos algo conscientemente como, por ejemplo, ganar más dinero, si nuestro subconsciente contiene información de que es muy difícil ganarse la vida, no lo conseguiremos.

¿Entonces?
Si cambiamos las percepciones que tenemos en el subconsciente, cambiará nuestra realidad, y lo he comprobado a través de numerosos experimentos. Al reprogramar las creencias y percepciones que tenemos de cómo es la felicidad, la paz, la abundancia, podemos conquistarlas.

Me suena a fórmula feliz...
Así es como funciona el efecto placebo. Si pienso que una pastilla me puede sanar, me la tomo y me encuentro mejor. ¿Qué me ha sanado?...

¿La creencia?
Eso parece. Al igual que los pensamientos positivos y el efecto placebo afectan a nuestra biología, existe el efecto nocebo: si crees que algo te hará daño, acabará por hacerte daño. Henry Ford decía que tanto si crees que puedes como si crees que no puedes, tienen razón. Si eliges vivir un mundo lleno de amor, tu salud mejorará.

¿Y eso por qué?
La química que provoca la alegría y el amor hace que nuestras células crezcan, y la química que provoca el miedo hace que las células mueran. Los pensamientos positivos son un imperativo biológico para una vida feliz y saludable. Existen dos mecanismos de supervivencia: el crecimiento y la protección, y ambos no pueden operar al mismo tiempo.

O creces o te proteges.
Los procesos de crecimiento requieren un intercambio libre de información con el medio, la protección requiere el cierre completo del sistema. Una respuesta de protección mantenida inhibe la producción de energía necesaria para la vida.

¿Qué significa prosperar?
Para prosperar necesitamos buscar de forma activa la alegría y el amor, y llenar nuestra vida de estímulos que desencadenen procesos de crecimiento. Las hormonas del estrés coordinan la función de los órganos corporales e inhiben los procesos de crecimiento, suprimen por completo la actuación del sistema inmunológico.

¿La culpa de todo la tienen los padres?
Las percepciones que formamos durante los primeros seis años, cuando el cerebro recibe la máxima información en un mínimo tiempo para entender el entorno, nos afectan el resto de la vida.

Y las creencias inconscientes pasan de padres a hijos.
Así es, los comportamientos, creencias y actitudes que observamos en nuestros padres se graban en nuestro cerebro y controlan nuestra biología el resto de la vida, a menos que aprendamos a volver a programarla.

¿Cómo detectar creencias negativas?
La vida es un reflejo de la mente subconsciente, lo que nos funciona bien en la vida son esas cosas que el subconsciente te permite que funcionen, lo que requiere mucho esfuerzo son esas cosas que tu subconsciente no apoya.

¿Debo doblegar a mi subconsciente?
Es una batalla perdida, pero nada se soluciona hasta que uno no se esfuerza por cambiar. Deshágase de los miedos infundados y procure no inculcar creencias limitadoras en el subconsciente de sus hijos.

Bruce Lipton es un Biólogo Celular y escritor estadounidenese.

Foto: Bruce Lipton Responde

"Me enseñaron que los genes controlan la vida, que en ellos se inscriben todas nuestras capacidades y características, pero es falso."

¿Del todo?
No somos víctimas de nuestra genética, en realidad es el ADN el que está controlado por el medio externo celular.

¿Qué significa eso?
La célula es la vida. Hablar de una célula es como hablar de una persona. Nosotros recibimos la información a través de los cinco sentidos y las células reciben las señales del entorno a través de los receptores que captan la información. El ADN es controlado por señales que vienen desde fuera de la célula, incluyendo mensajes energéticos de nuestros propios pensamientos, tanto los positivos como los negativos.

¿Somos lo que vivimos y pensamos?
Sí, y cambiar nuestra manera de vivir y de percibir el mundo es cambiar nuestra biología. Los estudios que empecé hace cuarenta años demuestran que las células cambian en función del entorno, es lo que llamamos epigenética. Epi significa por encima de la genética, más allá de ella.

¿Y?
Según el entorno y como tú respondes al mundo, un gen puede crear 30.000 diferentes variaciones. Menos del 10% del cáncer es heredado, es el estilo de vida lo que determina la genética.

¿Es el entorno el que nos define?
Aprendemos a vernos como nos ven, a valorarnos como nos valoran. Lo que escuchamos y vivimos nos forma. No vemos el mundo como es, vemos el mundo como somos. Somos víctimas de nuestras creencias, pero podemos cambiarlas.

Pero las creencias están inscritas en lo más profundo de nuestro subconsciente.
Cierto. El subconsciente es un procesador de información un millón de veces más rápido que la mente consciente y utiliza entre el 95% y el 99% del tiempo la información ya almacenada desde nuestra niñez como un referente. Por eso cuando decidimos algo conscientemente como, por ejemplo, ganar más dinero, si nuestro subconsciente contiene información de que es muy difícil ganarse la vida, no lo conseguiremos.

¿Entonces?
Si cambiamos las percepciones que tenemos en el subconsciente, cambiará nuestra realidad, y lo he comprobado a través de numerosos experimentos. Al reprogramar las creencias y percepciones que tenemos de cómo es la felicidad, la paz, la abundancia, podemos conquistarlas.

Me suena a fórmula feliz...
Así es como funciona el efecto placebo. Si pienso que una pastilla me puede sanar, me la tomo y me encuentro mejor. ¿Qué me ha sanado?...

¿La creencia?
Eso parece. Al igual que los pensamientos positivos y el efecto placebo afectan a nuestra biología, existe el efecto nocebo: si crees que algo te hará daño, acabará por hacerte daño. Henry Ford decía que tanto si crees que puedes como si crees que no puedes, tienen razón. Si eliges vivir un mundo lleno de amor, tu salud mejorará.

¿Y eso por qué?
La química que provoca la alegría y el amor hace que nuestras células crezcan, y la química que provoca el miedo hace que las células mueran. Los pensamientos positivos son un imperativo biológico para una vida feliz y saludable. Existen dos mecanismos de supervivencia: el crecimiento y la protección, y ambos no pueden operar al mismo tiempo.

O creces o te proteges.
Los procesos de crecimiento requieren un intercambio libre de información con el medio, la protección requiere el cierre completo del sistema. Una respuesta de protección mantenida inhibe la producción de energía necesaria para la vida.

¿Qué significa prosperar?
Para prosperar necesitamos buscar de forma activa la alegría y el amor, y llenar nuestra vida de estímulos que desencadenen procesos de crecimiento. Las hormonas del estrés coordinan la función de los órganos corporales e inhiben los procesos de crecimiento, suprimen por completo la actuación del sistema inmunológico.

¿La culpa de todo la tienen los padres?
Las percepciones que formamos durante los primeros seis años, cuando el cerebro recibe la máxima información en un mínimo tiempo para entender el entorno, nos afectan el resto de la vida.

Y las creencias inconscientes pasan de padres a hijos.
Así es, los comportamientos, creencias y actitudes que observamos en nuestros padres se graban en nuestro cerebro y controlan nuestra biología el resto de la vida, a menos que aprendamos a volver a programarla.

¿Cómo detectar creencias negativas?
La vida es un reflejo de la mente subconsciente, lo que nos funciona bien en la vida son esas cosas que el subconsciente te permite que funcionen, lo que requiere mucho esfuerzo son esas cosas que tu subconsciente no apoya.

¿Debo doblegar a mi subconsciente?
Es una batalla perdida, pero nada se soluciona hasta que uno no se esfuerza por cambiar. Deshágase de los miedos infundados y procure no inculcar creencias limitadoras en el subconsciente de sus hijos.

Bruce Lipton es un Biólogo Celular y escritor estadounidenese.

Biodescodificación Genealógica y Antroposíntesis Cuarta Parte


Por el Dr.Manuel Gerardo Monasterio

Cuando los detractores malinformados o malintencionados-o ambas cosas a un tiempo- critican al Dr. Ryke Geerd Hamer en base a los fracasos terapéuticos del médico alemán, lo hacen citando casos aislados y/o muy mal documentados. Pero además, y fundamentalmente, es esta una estrategia pobre y de muy corto alcance, ya que si juzgáramos a la oncología oficial por los resultados estadísticos a mediano y largo plazo, y por la índole de la calidad de vida que la terapéutica convencional otorga a los pacientes oncológicos tratados por dicha metodología, la crítica que recaería sobre la medicina oficial habría de ser muchísimo más severa que la que le toca al Dr. Hamer. Pero la insidia y la irrespetuosidad extrema con que se juzga al Dr. Hamer, tiene su fundamento en realidad en dos factores esenciales. El primero es que se trata de la confrontación de dos maneras antagónicas de ver la vida en general y al hombre en particular.Estamos aquí ante a la confrontación de dos cosmovisiones dilemáticas. Una se basa en comprender,observar, incentivar y potenciar la innata capacidad autorreguladora, autopoiética y homeostásica del organismo humano. La otra reposa sobre la convicción de que el organismo humano no puede recuperarse sin drásticas intervenciones por parte de una medicina crecientemente tecnológica que utiliza agentes químicos de síntesis con una cantidad variable de efectos colaterales e interacciones iatrógenas. Y es esta última palabra la clave para comprender lo que ocurre con la práctica de la medicina oficial. Recuerdo una frase de mi gran amigo y maestro, el Dr. Samuel Tarnopolsky, eximio maestro de la Reumatología Argentina, que dijo, refiriéndose a su especialidad: “ La reumatología es inevitablemente iatrogénica, quien le tema a eso debe buscarse otra especialidad”. El problema de la actual terapéutica alopática es que la Iatrogenia ha pasado a ser, no sólo algo aceptable, sino que ya ni siquiera se discute. Por otra parte, si el paciente oncológico fallece durante el curso de un tratamiento no alineado con la medicina oficial, la conclusión es : “Ha sido asesinado por la charlatanería curanderil”. Si muere dentro del protocolo oncológico de la medicina oficial la conclusión es: “Se hizo todo lo posible”.
La calidad de vida, el respeto a la integridad total del sujeto humano, el nivel de compromiso personal del paciente y la lucidez con la que se confronte con el pasaje inevitable de toda existencia humana, no cuentan en absoluto. Ni el enfoque de la medicina oficial ni el de las terapéuticas alternativas pueden garantizar curación. Mejorías, alivio y eventuales remisiones pueden darse en diversos pacientes independientemente del tratamiento utilizado. Pero el grado de sufrimiento infligido por uno u otro enfoque no tiene punto de comparación. Basta ver el estado físico y mental de un porcentaje enorme de pacientes tratados por la quimioterapia y la radioterapia. Más adelante hablaré de la quimioterapia en particular, pero permitan que pase ahora al segundo factor esencial en esta ecuación de denigración indiscriminada hacia las teorías del Dr. Hamer.
Usualmente se habla de las ganancias multimillonarias de las multinacionales farmacéuticas con las drogas quimioterápicas, y sin duda todas esas sustancias sumamente venenosas son además, incréiblemente costosas. Pero hay muchos otros elementos en juego, que pasaré a detallar. Hay una descomunal industria corporativa y académica montada alrededor del cáncer y su investigación: fundaciones, institutos, organismos públicos y privados, miles de investigadores médicos, biólogos moleculares, bioquímicos, miles de personas cuyo sustento depende del sostenimiento de la línea de investigación oficial. A eso hay que sumar los miles de oncólogos clínicos y de profesores universitarios que han formado y sustentan su vida profesional y económica sobre las líneas terapéuticas, educativas y conceptuales que sustentan la terapéutica de la medicina oficial. Y no me refiero sólo a un tema económico, está el costo moral y psicológico de miles de vidas dedicadas a desarrollar una cosmovisión médica que deriva en los conceptos que la medicina oficial mantiene sobre el cáncer y su tratamiento…
La comparación de lo que se invierte en gente, dinero y tiempo en investigaciones que siguen el lineamiento oficial, con lo que se invierte en tratamientos biológicos o alternativos, es absurda. Los investigadores independientes deben costear sus estudios con sus propios recursos o los aportes esporádicos de almas caritativas, y mientras la medicina oficial cuenta con millones de conejitos de Indias para probar sus drogas quimioterápicas sin sufrir perjuicio alguno si muchos pacientes padecen sufrimientos y muertes horribles, si se les llega a morir un solo paciente oncológico a los que practican enfoques biológicos alternativos, se arriesgan a perder el ejercicio de la profesión y a ir a la cárcel…Todo lo cual, le ha ocurrido literalmente al Dr. Geerd Ryke Hamer.
Para aquellos lectores que estén interesados en conocer al Dr. Hamer desde una perspectiva distinta a la que hallaran en “Wikipedia”, se los contaré en la nota que sigue.